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Una colonia de chinchillas vive literalmente sobre una montaña con una reserva rica en oro y plata. La compañía minera, con casa matriz en Sudáfrica, Gold Fields tiene un plan para reubicar a estos roedores que se encuentran en peligro de extinción debido a que en el pasado fueron capturados por su valioso pelaje y actualmente se encuentran protegidos por ley.  

Por Equipo de Preservar

Su distribución geográfica actual comprende la zona andina de las regiones de Atacama y Antofagasta, por lo que la conservación de su hábitat pasa a ser un asunto crítico para su conservación.

A los expertos les preocupa que la captura pueda originar mortandad entre los especímenes y la reubicación puede que no sea del todo exitosa. El biólogo canadiense Curtis Bosson advirtió, en declaraciones recogidas por The Atlantic, que “Las chinchillas son una especie social colonial; no están acostumbrados a grandes interrupciones en su rutina diaria. Saben dónde encontrar comida y quién es su vecino a diario. La reubicación interrumpiría todo esto».

El plan de reubicación de las chinchillas

El Sistema de Evaluación Ambiental (SEA) aprobó en diciembre de 2018 el proyecto minero que impulsa Gold Fields -Salares Norte- en la Región de Atacama para la extracción de oro y plata. Su ejecución contempla que la empresa reubique a una colonia de 25 chinchillas que viven en el lugar.

Según explicó Luis Ortega, encargado de operación, a The Atlancic, los ejemplares son capturados en jaulas para ser trasladados a un territorio que se encuentra a 5 km del yacimiento. Esta operación comenzó en agosto y se proyecta que dure 9 meses a un costo de 400 mil dólares.  “De acuerdo con el proceso aprobado por el gobierno, se deben realizar dos intentos de capturar especímenes en cada área rocosa, cada uno con una duración de 10 días”, señaló Ortega. Además, el plan contempla que la captura debe suspenderse durante 20 días si el intento no tuvo éxito antes de un nuevo intento.

La compañía minera espera iniciar la construcción de Salares Norte en noviembre de 2020. Con una inversión estimada de mil millones de dólares, el proyecto se encuentra a 180 Kilómetros al Noreste de Diego de Almagro y a más de 3900 metros sobre el nivel del mar.