Una inesperada ola de calor en Europa: la amenaza del cambio climático
Las condiciones sofocantes en Europa han llegado antes de lo esperado este año, pero la mala noticia es que son tan solo una muestra de lo que está por venir: olas de calor anticipadas y más sequías severas.
Por Equipo de Preservar/ONU Noticias.
Como consecuencia del cambio climático, las olas de calor empiezan antes y son cada vez más frecuentes y graves debido a las concentraciones récord de gases de efecto invernadero que atrapan el calor. Lo que estamos presenciando hoy es un anticipo del futuro.
Según la Organización Meteorológica Mundial (OMM), la intensa ola de calor que azota Europa en estos momentos viene del norte de África. Un sistema de bajas presiones del Atlántico entre las Azores y Madeira está alimentando el frente cálido, empujándolo hacia el oeste de Europa.
A pesar de que solo estamos a mediados de junio, en algunas partes de España y Francia las temperaturas son, de media, más de 10 grados centígrados (o 50 grados Fahrenheit) por encima de la mediapara esta época del año.
En Francia, el pico de calor se produce tras el mes de mayo más cálido y seco del que se tiene constancia, y la agencia meteorológica del país afirmó que se trata de la primera ola de calor desde 1947.
El servicio de meteorología francés indicó que se prevén temperaturas máximas diurnas de 35 a 38°C y mínimas nocturnas superiores a 20°C.
Alarmante sequía generalizada
Las alertas de sequía son una preocupación añadida en gran parte de Europa occidental, ya que no se prevén lluvias significativas en el continente en los próximos días, aparte de tormentas aisladas.
Extensas zonas desde el sureste de Europa Central hasta el noroeste del Mar Negro también se ven azotadas por la sequía, señaló la agencia de meteorología, añadiendo que en Estados Unidos gran parte del oeste del país se enfrenta a su segundo o tercer año de sequía consecutivo, y se teme que haya un creciente estrés hídrico de cara a la temporada de verano.
Los dos mayores embalses de Estados Unidos, el lago Mead y el lago Powell, en Arizona, se encuentran actualmente en los niveles más bajos desde que se llenaron: ambos están justo por debajo del 30% de su capacidad, según el US Drought Monitor (supervisión de la sequía de Estados Unidos).
Según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, la frecuencia de ciertos tipos de fenómenos meteorológicos y climáticos extremos va en aumento debido al cambio climático y varios estudios de atribución han demostrado que este ha hecho más intensos muchos fenómenos recientes.
El Grupo prevé que, con 1,5 ºC de calentamiento global, aumentarán las olas de calor, se alargarán las estaciones cálidas y se acortarán las frías.
Con 2 °C de calentamiento global, los extremos de calor alcanzarían con mayor frecuencia umbrales de tolerancia críticos para la agricultura y la salud, según el informe.