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Incluso en niveles bajos de plomo en la sangre, este elemento puede causar grandes daños en las personas, especialmente en los niños, a nivel neurológico, con daño cerebral y dificultades en el comportamiento, que serían irreversibles.

Por Equipo de Preservar

Según un reporte publicado el 29 de julio de este año, por el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y la ONG Pure Earth, 800 millones de niños en el mundo están intoxicados por plomo, con niveles en la sangre iguales o superiores a 5 microgramos por decilitro de esta neurotoxina. Esto ocasiona que muchos de estos niños tienen dificultades de comportamiento, mal desarrollo cognitivo y problemas de aprendizaje.

«El plomo, que apenas genera síntomas al principio, causa estragos silenciosos en la salud y el desarrollo de los niños, con consecuencias potencialmente fatales», señaló en un comunicado la directora ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore. La funcionaria agregó que «conocer el alcance de la contaminación por plomo y comprender la destrucción que causa en las vidas de las personas y las comunidades debe inspirar medidas urgentes para proteger a los niños de una vez por todas».

Según el estudio, uno de las principales agentes de contaminación por plomo son las baterías de vehículos, donde el parque automotor en países de ingresos bajos y medios se ha triplicado desde 2000. Esta masificación del automóvil y la falta de reglamentación e infraestructura hacen que el reciclaje de baterías se haga de forma peligrosa e ilegal envenenando el entorno y a las personas.

También son relevantes como fuente de contaminación las cañerías de agua fabricadas con plomo; la minería; la gasolina con plomo, que ha disminuido considerablemente en los últimos decenios, pero que fue una fuente histórica importante de intoxicación; y la pintura y pigmentos en base a plomo.

El reporte también indica que si bien los niveles de plomo en la sangre han disminuido drásticamente en la mayoría de los países de ingresos altos desde la eliminación gradual de la gasolina con plomo y la mayoría de las pinturas a base de plomo, los niveles de plomo en la sangre de los niños de los países de ingresos bajos y medios han seguido siendo elevados y, en muchos casos, peligrosamente altos.

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